6 consejos para aumentar nuestro rendimiento como intérpretes

La interpretación simultánea es una profesión exigente que requiere concentración, agilidad mental y resistencia física. Para rendir al máximo, es fundamental que los intérpretes de conferencia cuidemos nuestro bienestar general. A estas alturas todos sabemos lo importante que es nuestra dieta y nuestro estilo de vida para tener una buena salud, algo que afecta directamente a nuestro rendimiento como intérpretes.

Vamos a ofrecer una serie de recomendaciones generales, que no pretenden en ningún caso ser exhaustivas o sustituir la visita a un nutricionista o médico, pero que pueden servir de ayuda a todos los intérpretes.

1. Descanso

El descanso es fundamental para una infinidad de funciones de nuestro organismo, entre ellas, la función cognitiva. Sin un sueño reparador, no tendremos la mente despejada, que es esencial para poder interpretar bien. Asegúrate de dormir entre 7 y 9 horas cada noche y evita el uso de pantallas antes de dormir para mejorar la calidad del sueño.
Durante las jornadas de interpretación, es muy recomendable levantarte y caminar un poco, si puede ser al aire libre, para mejorar tu circulación sanguínea y oxigenación.

2. Ejercicio físico

El ejercicio físico no solo mejora nuestro tono muscular, libera endorfinas y nos hace más resistentes, sino que también aumenta la claridad mental y reduce el estrés. Todo son ventajas, ¿verdad? Eso sí, no hay atajos: tu plan de entrenamiento debe ser sostenible en el tiempo y lo debes realizar con regularidad. Si tienes más de 40 años (y si no, también), incluye ejercicios de fuerza, que contrarrestan la pérdida de masa muscular y de densidad ósea.

3. Alimentación

Debemos priorizar el consumo de frutas y verduras, alimentos con fibra y proteínas. Los carbohidratos deberían ser integrales (complejos), lo que ralentiza su absorción y evita picos de glucosa. Debemos huir especialmente de azúcares y productos ultraprocesados porque liberan el azúcar muy rápidamente en la sangre (pico de glucosa) y después viene la consiguiente bajada y esto reduce tu nivel de energía y causa fatiga y falta de concentración. Además, estas fluctuaciones bruscas en los niveles de glucosa pueden afectar a nuestro estado de ánimo, lo que podría interferir en nuestra capacidad de mantener la calma y la concentración durante la interpretación.
¿Qué podemos hacer al salir a la pausa para el café en un congreso y encontrarnos con toda esa bollería tan apetecible? Si en el catering han puesto fruta fresca, esa será la mejor opción. Además, puedes recurrir a nueces y semillas (ricas en fibra y saciantes), yogur natural (proteínas y probióticos) o barritas de cereales integrales (ricas en fibra).

4. Hidratación

Estar bien hidratado es esencial para el funcionamiento cognitivo. La deshidratación puede afectar negativamente tu concentración y memoria, además de provocar dolor de cabeza, algo que todo intérprete teme. Bebe suficiente agua a lo largo del día (entre 2 y 3 litros en función de tu peso corporal) y, si buscas algo de variedad, consume bebidas hidratantes como tés de hierbas o aguas infusionadas. Huelga decir que debemos evitar refrescos azucarados y, por supuesto, alcohol.

5. Ejercicios de calentamiento vocal

Practica respiraciones profundas para relajar el diafragma y preparar tu sistema respiratorio. Realiza vocalizaciones suaves como tararear o emitir sonidos vocálicos en diferentes tonos para preparar tus cuerdas vocales antes de una sesión de interpretación.

6. Técnicas de relajación

La interpretación simultánea puede ser una profesión altamente estresante debido a la necesidad de mantener una concentración intensa y responder rápidamente en tiempo real. ¿Cómo podemos gestionar el estrés? Las respiraciones profundas son sencillas de realizar y tienen un beneficioso efecto calmante: siéntate con la espalda recta y los pies apoyados en el suelo, inhala lentamente por la nariz, retén el aire y exhala lentamente. Intenta repetir el ciclo varias veces. Esto lo puedes hacer incluso en cabina sin que nadie se dé cuenta y es muy efectivo.
También puedes dedicar unos minutos al día a la meditación, ya que calma tu mente y reduce el estrés. Para ello, busca un lugar tranquilo, siéntate cómodamente y cierra los ojos, concéntrate en tu respiración. Si tu mente se distrae, redirige tu atención a tu respiración.
Esperamos que estas recomendaciones te resulten útiles. No dudes en añadir otras que tú apliques en comentarios.

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